viernes, 22 de enero de 2010

Podría

Podría pasar infinitas horas contemplando un amanecer, que dure minutos. Pensaría en las rutinas de todos los que transitamos en esta tierra de locos, donde la felicidad parece ser una utopía inalcanzable. Despegaría mis pies del suelo, y miraría atentamente cada rayito de luz, que me hace feliz. Porque yo creo que la felicidad es posible, sólo si estamos dispuestos a disfrutarla. De lo contario, los seres humanos se empeñan en excusarse explicando que no pueden conseguir ser felices.

Podría llenarme de tantos vacíos... Vacíos que son simplezas que nos regala la vida, y son tan difíciles de guardar, que una vez que logramos guardarlas, se transforman en tesoros. Con el paso del tiempo, les decimos "recuerdos", pero son tesoros. Que nadie se engañe, las lágrimas no son de tristeza y dolor. Expresan que tenemos corazón, que los sentimientos no son palabrerío de poetas, y existen.

Podría mirar tu mirada. Podría abrazar tus abrazos. Podría sonreír tus sonrisas. Podría besar tus besos. Podría recorrer el mundo entero o quedarme enfrente del mar. Podría tomarte de la mano y quitarte los miedos, enseñarte que no hay nada a qué temer, si estamos uno frente al otro.

Acá estoy.

1 comentario:

Facundo Martín dijo...

Me gustó el último párrafo. Durante toda enseñanza hay un importante aprendizaje... no hay maestría que no enriquezca ;)